Acostumbramos ya desde forma cotidiana, ya desde que crecemos en una familia en la que si se rompe algo, nos esforzamos para que quede de tal manera que nadie lo note, y que el próximo que lo agarre lo crea haber roto el, a perder el tiempo en desligar responsabilidades antes que buscar soluciones. Puede que sea algo común en pequeñas cosas como lo diario, puede que pase desapercibido, y puede que todos hagamos lo mismo, una cadena para no sentir culpas.
Por eso puede surgir de una crianza, o de formas de aprenderlas, que de lo pequeño podemos llegar a hacer grandes cosas. Cosas que escuchamos todos los días, en noticieros, charlas familiares, con amigos.. escuchamos siempre críticas de la sociedad, escuchamos decir que todo está dado vuelta, consideran una GRAN CRISIS SOCIAL, ya sea desde el punto televisivo, el juvenil, los lazos entre las parejas actuales, los talentos, lo superficial, lo capitalista, el calentamiento global y otras cosas. Pero lo único que escuchamos es eso: críticas. Como si todo estuviera fuera de nuestro alcance, como si las cosas están así por algo más fuerte y poderoso que nuestra propia voluntad. No lo creo así. No lo creo así porque todos terminamos cayendo en esa hipocresía. Porque mientras criticamos no vemos lo que hacemos y en la situación que estamos, porque todo lo que nos pasa solamente nosotros lo estamos permitiendo.
Y puta madre, no me siento excluida de todo eso.
Marina-